La cadena de frío es una parte fundamental de la logística, en la que se mantienen temperaturas controladas para garantizar la integridad de los productos perecederos desde el punto de origen, pasando por los centros de distribución, hasta la llegada al consumidor final.
El tránsito hacia una automatización real ha experimentado avances significativos en los últimos años, gracias a la incorporación de sensores, sistemas de trazabilidad, tecnologías blockchain o Digital Twins. Estas herramientas han mejorado la eficiencia y precisión en la gestión de la temperatura. Paralelamente, gracias a estas mejoras, se ha dado una subida en los niveles de almacenamiento en frío durante el primer trimestre de 2023. En su informe, el Observatorio del Frío de ALDEFE sitúa esta alza en casi un 77% de ocupación.
Estos son algunos de los retos tecnológicos que afrontan las compañías dedicadas a la conservación de productos refrigerados y congelados.
Automatización de la cadena de frío, ¿qué implica?
El proceso de digitalización y automatización se refiere al uso de tecnología y sistemas para controlar y gestionar las condiciones de temperatura a lo largo de la cadena de suministro. Estas técnicas se implantan en áreas como el almacenamiento, transporte y distribución de productos que requieren temperaturas específicas.
Para comprender completamente la automatización de la cadena de frío, es esencial conocer las tecnologías clave involucradas en este proceso.
- Internet de las cosas (IoT)
El internet de las cosas se utiliza para conectar sensores y dispositivos en las áreas en las que hay un almacenamiento a temperatura controlada. Esto permite la recopilación de datos en tiempo real y la toma de decisiones automatizada.
- Sistemas ASRS o AGVs
Un sistema de almacenamiento y recuperación automático (ASRS, por sus siglas en inglés) consiste en una solución de gestión de inventario controlada por ordenador, que agiliza la manipulación, el almacenamiento y la recuperación de artículos. De esta manera, las empresas pueden asegurarse de que su mercancía se guarda a los niveles óptimos de temperatura y humedad.
Esta práctica supone una gran ventaja que permite aprovechar el espacio tanto del suelo como en altura, considerando el disponible en un almacén. Al trabajar en conjunto con los sistemas de gestión de almacenes (SGA), una solución ASRS optimiza el almacenamiento de productos, las operativas de picking y el rendimiento general.
Por otra parte, los vehículos de guiado automático (AGVs) permiten que grandes volúmenes de mercancías se transporten de forma autónoma, sin requerirse de personal que realice las operaciones de forma manual. Esta metodología posee múltiples cualidades entre las que están la seguridad, robustez y adaptabilidad a las necesidades empresariales. Su manejo se basa en una interfaz de usuario enlazada a una página web desde la cual se realiza la programación.
- Fase de picking
Además de ser una etapa crítica para la seguridad, en el picking no siempre es posible la aportación de los operarios (pensemos que, en los almacenes de productos congelados las temperaturas pueden llegar a ser de -30º C).
Tanto para evitar choques de temperatura como para agilizar los tiempos y evitar el deterioro, los centros de logística más modernos utilizan robots para automatizar el picking. Además, la tecnología más reciente ha incorporado el voice picking, permitiendo al operador dar órdenes y recibirlas por un auricular.
- Sistemas de monitorización en remoto
Estos mecanismos de monitorización permiten a los operadores supervisar las condiciones de temperatura y otros factores desde ubicaciones remotas. Esto es esencial para tomar medidas rápidas en caso de alteraciones.
- Inteligencia Artificial
La Inteligencia Artificial ha abierto un abanico de posibilidades en la manera de afrontar las operaciones logísticas. Según recogen las previsiones futuras, la inteligencia artificial se aplicará en especial en la planificación de rutas, predicción de la demanda y detección temprana de problemas para una solución rápida que no afecte a los sistemas de refrigeración, ni al rendimiento de la cadena de suministro.
Beneficios de la digitalización en el transporte refrigerado
La digitalización de la cadena de frío ofrece una serie de beneficios clave para las empresas logísticas que gestionan productos perecederos, estos son:
- Reducción de costes
La eficiencia mejorada y la reducción de errores se traducen en ahorros significativos a lo largo de la cadena de frío. Las empresas pueden optimizar el uso de recursos y minimizar el desperdicio de productos debido a problemas de temperatura.
- Agilizar los procesos
Gracias a los sistemas automatizados tipo “shuttle” que dotan de fluidez y continuidad a la cadena de suministro, se mejora la trazabilidad de las mercancías y se reducen los errores, convirtiendo los almacenes en completos sistemas automáticos. De esta manera, la posibilidad de una rotura en la cadena de frío es menor.
- Análisis predictivos
Estos sistemas también permiten ver con antelación la ruta programada para identificar problemas y proponer una solución, incluso antes de que ocurran, trazando la temperatura pronosticada a lo largo de la ubicación prevista para un transporte de largo recorrido e identificando los envíos en riesgo.
La automatización de la cadena de frío es una parte fundamental de la logística moderna, especialmente en industrias donde la temperatura es crítica para la calidad y la seguridad de los productos. Los beneficios de la automatización, como un control preciso de la temperatura, la reducción de errores humanos y la optimización de la cadena de suministro, son evidentes.
Conforme la tecnología sigue mejorando, es probable que la automatización de la cadena de frío se vuelva más sofisticada y accesible para las empresas. Aquellos que hagan frente a los desafíos asociados a la digitalización de procesos estarán mejor preparados para aprovechar al máximo los beneficios que ofrece la digitalización de la supply chain, en la logística de productos sensibles a la temperatura.