El auge del e-Commerce no es ninguna novedad, como tampoco lo es que su explosión a raíz de la pandemia ha revolucionado los hábitos de consumo. Ante este panorama, la distribución capilar ha adquirido un papel destacado por su contacto directo con el usuario final y por su elevado coste.
Asimismo, los micro hubs están también despegando como un elemento relevante en el contexto de la distribución urbana de mercancías (DUM). Se trata de pequeños espacios de almacenamiento ubicados en núcleos urbanos. Se podrían considerar una especie de cross docking, ya que su tamaño reducido implica que los productos pasan poco tiempo en las instalaciones.
La principal función de estos microalmacenes logísticos es acortar las distancias entre repartidores y consumidores. Al situarse en las ciudades, se agilizan las entregas y se pueden emplear medios de transporte verdes, como vehículos sostenibles, bicicletas o, si la distancia lo permite, incluso puede llevarse a cabo el reparto a pie.
Dificultades en la DUM
Los micro hubs dan respuesta a muchas de las restricciones y problemas que se encuentran las empresas en la DUM. Estas se podrían dividir en dos sentidos:
- Por un lado, las dificultades que se derivan de las exigencias de los consumidores. La inmediatez en las entregas, que insta a conseguir un reparto ultrarrápido, y las devoluciones gratuitas, sin querer asumir un coste añadido, son algunas de estas problemáticas.
- Por otro lado, los propios códigos de circulación y legislaciones de tráfico están adoptando medidas para conseguir ciudades verdes, peatonalizando zonas, restringiendo el acceso de tráfico, eliminando lugares de aparcamiento o creando áreas de bajas emisiones. Esto dificulta la tarea de las empresas de DUM, ya que se limita la movilidad y no hay espacios destinados a las entregas de proximidad.
Beneficios de los micro hubs
Como resultado a estas problemáticas, los micro hubs se están posicionando como la mejor forma de hacerles frente.
Contribuyen a la descongestión de las ciudades y la sostenibilidad
Como consecuencia de las limitaciones de movilidad y espacio en los centros urbanos, cada vez son más los vehículos que transitan por un área menor. Esto provoca un aumento del tráfico y de la contaminación, lo que perjudica a toda la sociedad.
Sin embargo, la aparición de micro hubs sería una solución, ya que podría permitir que se empleen otros medios de transporte como bicicletas, reduciendo así las emisiones de CO2, al disponer de estas pequeñas instalaciones de almacenamiento más cerca de los destinatarios.
Hacer frente a las demandas del last mile
Esta misma cercanía de los micro hubs supone, por sí misma, un beneficio en la DUM, ya que se reducen los tiempos de reparto. Esto permite hacer frente a la demanda del mercado en la última milla, ya que, con el auge del e-Commerce, cada vez era más difícil cumplir los plazos de entrega estipulados por el alto volumen de pedidos.
Esto contribuye a mejorar la experiencia del usuario, así como a aumentar su nivel de satisfacción. Por lo tanto, es un beneficio que permite fidelizar al cliente y posibilita el retorno de compra.
Omnicanalidad
Gracias a los micro hubs, es más fácil gestionar los pedidos de las diferentes estrategias omnicanal que implementan las empresas. La posibilidad de llegar al destinatario a través de diferentes canales, próximos a él, es una gran ventaja que retribuye directamente en su satisfacción.
Proyecto LEAD
El proyecto LEAD (visita aquí su página web), que se engloba dentro de la iniciativa CIVITAS promovida por la Unión Europea, busca crear gemelos digitales de operaciones logísticas de última milla de bajas emisiones. Se están llevando a cabo estrategias enfocadas a este fin en seis centros urbanos europeos: Madrid, La Haya, Lyon, Oporto, Budapest y Oslo.
La visión de LEAD se enfoca a largo plazo, ya que se pretende conseguir una movilidad inteligente y sostenible a través de innovaciones en las redes logísticas en las ciudades. Entre las diferentes soluciones que se están introduciendo, se encuentra precisamente la creación de micro hubs que ayuden a la distribución urbana de mercancías.
En definitiva, se trata de espacios con grandes beneficios para la DUM y que, además, contribuyen al cumplimiento de las normativas de circulación, a la sostenibilidad y a hacer frente a la omnicanalidad y la satisfacción de los usuarios.