El sector farmacéutico presenta unas particularidades que hacen que el last mile adquiera especial importancia en el proceso de suministro.
La orientación al consumidor es un factor clave en los modelos de negocio actuales, donde se sitúa en el centro la satisfacción del usuario y su fidelización. En este contexto, la última milla es parte fundamental del proceso de venta y suministro de las empresas, que buscan entregar los productos en el menor tiempo y con la mayor calidad posible para garantizar una buena experiencia del usuario.
Importancia de la última milla en el sector farma.
El transporte de mercancía en la última milla adquiere especial relevancia en el sector farma, donde es necesario preservar los productos médicos y garantizar que se mantengan en las condiciones adecuadas para su entrega. Una mala gestión de la parte final de la cadena de suministro puede provocar que se echen a perder los medicamentos y mercancías sanitarias, con graves consecuencias económicas para la empresa.
Además, esto puede alterar y perjudicar a la capacidad de respuesta y de atender a los pacientes de los clientes que esperan recibir esa mercancía, como pueden ser hospitales, clínicas, centros de salud, farmacias e, incluso, usuarios de a pie.
Para entender la última milla en farma es necesario conocer sus peculiaridades, la importancia de su correcto desarrollo y las claves de su éxito.
Tecnología
El uso de la tecnología es uno de los principales pilares del last mile, sobre todo en el sector farma, donde entra en juego la necesidad de mantener la cadena de frío de forma segura. En el transporte de medicamentos es imprescindible garantizar el acceso, la correcta conservación y la calidad durante todo el proceso, desde que salen del almacén hasta que se entregan en farmacias, hospitales, centros de salud y usuarios.
Con la pandemia se ha demostrado que el suministro y distribución de productos procedentes de la industria farmacéutica son actividades clave y esenciales para la sociedad. Por eso, es un sector altamente controlado, en el que se persigue y se exige que la mercancía sanitaria llegue en condiciones óptimas a los consumidores y clientes.
Uno de los requisitos para el traslado de medicamentos es el cumplimiento de la normativa GDP (Good Distribution Practices), que garantiza procedimientos de distribución seguros, fiables e higiénicos. En este sentido, es necesario que los medios de transporte empleados cuenten con temperatura controlada. Para ello se utiliza tecnología avanzada, como sensores y dispositivos termógrafos que miden la temperatura de la mercancía durante todo el trayecto y en tiempo real.
La importancia de su uso radica en la problemática que podría generarse si hubiese un fallo en la cadena de frío: en el sector farma los productos sanitarios y médicos podrían verse afectados y perder su efectividad. El cumplimiento de la normativa y el mantenimiento del rango de temperatura requerido son los principales objetivos que se persiguen en la última milla de la industria farmacéutica.
Planificación de rutas
La organización de las rutas asegura una mayor eficiencia en la distribución de la mercancía sanitaria. El objetivo es entregarla en el menor tiempo posible, garantizando su seguridad y conservación, y consiguiendo que la entrega sea rápida y satisfactoria para el cliente.
Con esta planificación, se puede conseguir trazar itinerarios que hagan coincidir varios repartos de una misma zona geográfica, reduciendo así la duración de los trayectos y agilizando el trabajo de los mensajeros. Además, con un software en tiempo real, es posible conocer la situación de las calles y carreteras, evitando atascos y obras que retrasen la entrega.
Formación del capital humano
El transporte de productos sanitarios es llevado a cabo empleando vehículos de temperatura controlada que son conducidos por mensajeros. Pero, antes, es imprescindible la buena formación y especialización de estos profesionales. Deben ser expertos en el tipo de artículos que están transportando y ser conscientes de la importancia de esa mercancía.
Esta importancia va más allá de un mero interés económico para la empresa. También tiene una trascendencia social, ya que los productos que transportan salvan vidas. Por ello, también es necesario que el personal sea un buen conocedor de los diversos puntos de entrega, para garantizar la mejor, más rápida y más eficiente recepción de los pedidos.
Sostenibilidad
Una de las principales preocupaciones actuales a nivel mundial es el calentamiento global y el cambio climático, conceptos muy extendidos y utilizados en cualquier ámbito. En el sector logístico estos términos adquieren especial relevancia por el alto empleo de medios de transporte. En el contexto del last mile, se buscan vehículos adecuados y adaptables a las ciudades e, incluso, vehículos ecológicos con emisión 0.
Las empresas de transporte de mercancías deben establecer planes de actuación que permitan un desarrollo sostenible y garanticen la mínima contaminación. En este punto también influye la planificación de las rutas, ya que en el sector farma no solo ayuda a que los pedidos sean entregados en el mínimo tiempo, sino que también permite reducir el uso de combustible al optimizar los itinerarios de reparto.