La última milla o la distribución urbana de mercancías presenta, por sí sola, numerosos flecos sueltos que, tanto operadores logísticos, como retailers y desarrolladores de softwares de almacén y reparto, están terminando de pulir. Pero, ¿qué ocurre si a este tipo de reparto le añades particularidades y casuísticas concretas? ¿Cómo reacciona esta derivada logística si la alteras con un elemento que la hace más compleja?
De esto vamos a hablar en el post de hoy: de los retos, las tendencias y los aspectos más importantes que debes tener en cuenta si vas a operar una última milla a temperatura controlada.
Logística del frío: retos, tendencias y flecos sueltos
La logística de última milla, con el añadido del transporte refrigerado, no se centra únicamente en el entorno sanitario. Porque, aunque en España todavía estamos muy a la cola con respecto a Europa, en lo que a compras de supermercados online se refiere, la pandemia ha dado un giro total a nuestros hábitos, formas y ritmos de vida.
Según la CNMC, los supermercados y la alimentación ya son la tercera rama de mayor actividad en el eCommerce en España, teniendo por delante el retail y la electrónica.
Este dato, no hace otra cosa que darnos un indicio de que los consumidores finales están exigiendo servicios y políticas logística de última milla refrigerada a la altura de la situación. Pero un cambio tan repentino en su forma de vida, ha generado una problemática en los players del sector que ahora deben resolver de forma rápida y ante la que se encuentran con aspectos muy a tener en cuenta.
- Intervención de una gran cantidad de proveedores
- En general en logística, pero con más énfasis cuando esta es a temperatura controlada, intervienen una gran cantidad de players o proveedores que podrían hacerte perder el control o que son incapaces de integrarse unos con otros para que la operativa sea un todo del que beben unas cuantas partes individuales.
La externalización del reparto de última milla a temperatura controlada es un gran acierto, pero solo cuando estás contando con el proveedor adecuado. El refranero español tenía razón cuando decía “zapatero, a tus zapatos”. Y es que lo mejor que puede hacer uno es dedicarse a desarrollar y atender su core business, permitiendo delegar aquello que no está bajo su control, a especialistas.
Esto no deja de ser un reto importante, puesto que muchas de las empresas cuyos productos tienen que distribuirse en frío, cometen errores en el proceso, colocándose en una clara desventaja competitiva. Porque externalizar la distribución urbana de mercancías a temperatura controlada, es un claro beneficio, pero no puede ejecutarlo cualquiera.
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Seguridad:
Cuando hablamos de alimentos perecederos, de reparto de supermercados o de la última milla del canal Horeca, nos referimos a una industria muy delicada. Manejar alimentos conlleva una enorme responsabilidad y garantizar la continuidad de la cadena del frío durante el transporte es una cuestión de máxima relevancia.
Desde que se almacena, se expide, se distribuye y llega al destino, los productos en frío dependen de una temperatura concreta para sobrevivir, por lo que, si hay un claro reto en este proceso, ese es la seguridad de que nada falle. Para ello, es importante poner a disposición del servicio las herramientas, el personal y la tecnología adecuada.
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Tomarle el pulso al trayecto
Monitorizar el pedido desde la expedición en el almacén hasta el destino final es clave en operativas de última milla a temperatura controlada. Un reto que se puede resolver con cierta solvencia gracias a tecnologías como el 5G, que ya han revolucionado muchos sectores y que en logística no se ha quedado atrás.
A pesar de ello, también supone un reto o fleco suelto en el sector, puesto que su aplicación no es algo que tengan en cuenta todas las empresas del mercado. La misma, permite habilitar numerosas funcionalidades perfectas para la cadena del frío.
Asimismo, los Live Maps, GPS’s o trackers que se están desarrollando en el mercado, cumplen una misión esencial en el control total de la operativa, que también aporta visibilidad en tiempo real manteniendo una trazabilidad que ayuda a no perder el control en ningún momento.
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Mentalidad enfocada al dato: Big Data y Blockchain
No es noticia que la recolección, análisis y uso de los datos para la toma de decisiones está a la orden del día en logística. De hecho, ni siquiera es algo actual. Lo que sí debemos tener en cuenta y no perder de vista, es la posibilidad que ofrecen tecnologías como Big Data o Blockchain para garantizar esto de una forma rápida, accesible, segura y transparente.
A lo largo de una jornada de trabajo en distribución de mercancías refrigeradas, generamos una inmensa cantidad de datos que resultan enormemente útiles para tomar decisiones a posteriori. Pero no está al alcance de la mano humana recopilarlos todos, filtrarlos, analizarlos y estudiarlos. Para esto está la tecnología.
Gracias a algoritmos de inteligencia artificial o Machine Learning, se pueden crear modelos predictivos con los que conocer el efecto directo de un cambio o alteración concreta en un trayecto tipo a temperatura controlada. Tras haber recogido datos, se pueden simular situaciones y casuísticas concretas que nos permiten equivocarnos sobre el papel o dar con técnicas y estrategias muy útiles en el día a día de estas operativas.
Imagina que pudieras saber cuándo se va a descomponer la cámara de frío de un camión, o quizás cuando se va a dar una incidencia. Esto es clave para hacer un diagnóstico precoz de las situaciones y nos permite tomar decisiones en tiempo real, casi sin efectos sobre el proceso.
El siguiente paso es el del Blockchain, que con su transparencia y seguridad (100% encriptada) permite estar más cerca del cliente que nunca. Imaginemos que este es un restaurante. Bien, pues podrá saber, incluso, que los pedidos que ha hecho se han mantenido a una temperatura X durante todo el trayecto. Recuerda, la trazabilidad, sin lugar a dudas, ha adquirido un valor añadido y el rastreo de un pedido end-to-end es una ventaja competitiva.
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La digitalización
Pero no nos hace falta irnos hasta Blockchain, Big Data o Machine Learning para mantenernos en el TOP del servicio cuando nuestro reto es el de repartir un pedido a temperatura controlada. El primer paso es ser digitales y eso se consigue con una optimización y buena gestión de las flotas y rutas predefinidas.
Aunque parezca mentira, esto sigue siendo un reto para muchos clientes. En Grupo T.I. trabajamos con herramientas de última generación para la gestión optimizada de los recursos. Esto nos permite economizar el tiempo y el combustible cuando debemos repartir en los centros urbanos. La tecnología bien empleada, ayuda a mejorar la eficiencia, optimizando las rutas con gran volumen de pedidos, ventanas horarias diversas y dispersión geográfica. Hablamos de trazabilidad de pedidos en tiempo real.
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El poder del packaging:
Esto, más que un reto, es un dato curioso e interesante que te gustará conocer. ¿Sabes que hay alternativas en la última milla refrigerada que exigen un mantenimiento a –70 grados celsius?
Ante tal problemática, compañías especializadas apuestan ya por packagings que refrigeren por sí solos o ultra ligeros y con la capacidad de mantener el frío durante más tiempo del habitual.
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Sostenibilidad económica y medioambiental
La sostenibilidad es un concepto de 3 variables y afecta a: la economía, la sociedad y el entorno. Por ello, en este sector hay un gran reto. El de adaptar el vehículo a las exigencias de la operativa a la par que a las de la sostenibilidad. Es decir, ¿cómo puedo hacer un reparto limpio sin menoscabar la rentabilidad de la actividad? La respuesta a esto la tiene la tecnología y la ejecución de las operativas con flotas alineadas con el desarrollo sostenible.
Para terminar y, en definitiva, todos estos retos culminan en un mismo punto: las personas. El gran reto y, por ende, la cuestión más fundamental en este sector de la última milla a temperatura controlada, es ser capaz de contar con un equipo de personas a la altura.
Si el personal está familiarizado con la normativa, cualificado, formado y capacitado para efectuar una logística polivalente como esta, el éxito está casi garantizado.
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